Las mujeres de Ghana y Tailandia ocupan los primeros puestos como amantes más infieles del mundo en una nueva encuesta. Según la encuesta realizada por el fabricante de preservativos Durex entre 29.000 mujeres de 36 países, las malayas ocupan el tercer lugar, con un 39% que admite que suele engañar a su pareja, por detrás de Ghana (62%) y Tailandia (59%).
En cuarto y quinto lugar se encuentran Rusia (33%) y Singapur (19%) respectivamente, informó Star Online. Entre las parejas que se engañan mutuamente, Malasia quedó por detrás de Corea del Sur y de Tailandia, que encabeza la lista.
La misma encuesta sitúa a los hombres de Singapur y Hong Kong como los más promiscuos de Asia, con una media de 16 parejas de cama a lo largo de su vida.
¿Qué opinan los ghaneses de esta revelación?
Preguntamos a varios de ellos en la zona triestatal y el veredicto general fue de conmoción y consternación. «Es una conclusión absurda. ¿Qué criterios utilizaron para realizar su encuesta? ¿Con cuántas mujeres han hablado y qué métodos científicos han empleado para llegar a un veredicto tan contundente? Aunque no eximimos por completo a nuestras mujeres de hacer ciertas travesuras, diría que nosotras, las ghanesas, no somos las más notorias en ese sentido. Tengo amigas de otras etnias que están casadas y, al mismo tiempo, tienen varios amantes, y yo, felizmente casada con mi marido desde hace diez años, sólo me he desviado una vez, y la razón por la que lo hice fue porque teníamos problemas que parecían insolubles en ese momento. Desde que mi marido y yo volvimos a estar juntos, nunca le he engañado y no pienso hacerlo». Linda, que me pidió que no publicara su apellido, me había dicho.
Para Kwesi, propietario de un negocio en Hartford (Connecticut), esta definición sirve a las mujeres: «Es un hecho conocido en nuestra comunidad e incluso en nuestro país natal que nuestras mujeres no han sido fieles a sus maridos. Aquí, en la diáspora, no puedes decirle a tu mujer que se mantenga alejada de ciertas asociaciones, ella te arremeterá contra ti y te dirá que te ocupes de tus asuntos, que ella es adulta y sabe cuidar de sí misma, incluso saber cuándo decir no a una insinuación amorosa. Es tan deprimente para tan definido, espero que tomen o dos cosas de esta encuesta y den respeto a su estado civil.»
«Creo que la encuesta da en el clavo», me dijo una señora que pidió permanecer en el anonimato. «No me enorgullece decirlo; muchas de nuestras mujeres casadas se acuestan por ahí. Al menos entre mi círculo de amigas, en algún momento hemos mantenido otras relaciones. A veces, el impulso que las impulsa no es ni siquiera para obtener ganancias materiales, sino por la emoción que les produce. Pero no somos diferentes de otros africanos. Conozco a algunos amigos nigerianos que también están casados, pero tienen amantes fuera. Creo que nuestros hombres deberían encontrar en la revelación un medio para desafiarse a sí mismos y preguntarse qué es lo que están haciendo que no está bien. No creo que una mujer salga de buena gana a engañar a su marido si el ‘juego’ está ajustado en casa, si sabes lo que quiero decir»
¿Qué opinan ustedes, lectores? Nos gustaría tener vuestras reacciones.