De la cuarta a la duodécima semana: ¡es hora de socializar!
Me han dicho que desde la tercera semana hasta la décima, aproximadamente, es un periodo importante de socialización. Ese es el momento en que formaré vínculos que recordaré el resto de mi vida!
La leche de mamá empezó a disminuir alrededor de las cuatro semanas, así que ahora empiezo a comer alimentos sólidos. Cuando tenga seis semanas, ya me habrán salido todos los dientes de leche, lo que me ayudará a comer muchos más sólidos.
En las semanas seis a ocho, estoy en un periodo realmente importante para aprender a aceptar a los demás como parte de mi familia. Cuando tengo diez semanas (dicen que esto les ocurre a todos los cachorros entre la octava y la duodécima semana), me da un poco de miedo conocer a gente nueva. Aprecio cuando mis dueños son muy cuidadosos con mi socialización durante este período.
Mantenerme con mis hermanos y hermanas y mi mamá en esta etapa me está ayudando a aprender todo tipo de cosas útiles: la inhibición de la mordida, cómo entender y reaccionar a la comunicación canina normal, y mi lugar en la sociedad perruna.
Ahora que soy un cachorro de doce semanas estoy finalmente listo para conocer a mis dueños y mudarme a una acogedora casa propia. ¡Qué alegría! ¡Qué emoción!
Acabo de conocer a mi nueva familia para siempre y, vaya, ¡ya les quiero taaaanto! Ahora sólo estoy esperando a que piensen en un buen nombre de perro para mí. Los expertos en animales han demostrado que algunos nombres de perro pueden ser mejores que otros. Espero que mis nuevos dueños investiguen un poco sobre cómo llamar a su nuevo perro. Sea cual sea mi nuevo nombre, sé que será perfecto, porque mis nuevos dueños lo habrán elegido con mucho amor.